En una reciente declaración de las autoridades, se ha revelado que el icónico Lago de Atitlán enfrenta un preocupante grado de contaminación, planteando una amenaza seria a su belleza natural y sostenibilidad a largo plazo.
Según registros de la Autoridad Para el Manejo Sustentable de la Cuenca del lago de Atitlán y su Entorno, el cuerpo de agua se encuentra actualmente en el segundo de tres niveles de contaminación, donde el último podría resultar en la pérdida total del lago.
La preocupación entre los residentes de los diversos municipios es palpable. Expresan su temor de que, si la contaminación no se aborda a tiempo, el Lago de Atitlán podría perder su atractivo turístico y, como consecuencia, cientos de personas podrían quedarse sin empleo.